Todos hemos pasado por procesos durante el año 2022 y si estamos cerca o no de Dios, seguro que fuimos probados, en la fe, en nuestros caracteres, en las finanzas o a través de la salud o posiblemente en alguna otra área de nuestras vidas. Pero si hay algo seguro, es que el propósito de esas pruebas era para introducirnos a la Gloria de Dios.
2 CORINTIOS 4:17 “ Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria;
Claro, posteriormente a ese examen, estoy convencido que tenemos un mayor peso de gloria. Ahora podemos decir: “fui probado, pase la prueba y todavía estoy en pie. Y entraré al año 2023 todavía sobre mis pies y estoy en mi propósito, así que hay un nuevo peso de gloria en mi vida. En el nombre de Jesús. Amén”.
Una conclusión que tenemos hoy, es que Dios ha sido fiel, ha sido bueno, ha sido digno de confianza y podemos depender de Él. Y podemos decir a toda voz: la gloria es para Jesús.
Cuando un nuevo año inicia, nos preguntamos: que trae el futuro para nosotros?.
Lo que puedo decirte en este día, es que cada vez que una nueva temporada comienza, hay tres aspectos que se deben tomar en cuenta:
1. DEBEMOS TENER EXPECTATIVAS.
Expectativas de que algo bueno viene a nuestras vidas. Es decir, esperemos algo bueno, siempre y cuando hemos obedecido a Dios.
JEREMIAS 29:11 “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el futuro que esperáis.”
No importa lo que hayas pasado hasta este momento, Dios te dice: “tengo algo bueno para ti. Por lo tanto, quiero que tu esperes algo bueno en las diferentes áreas de tu vida.
ISAIAS 43:19 “He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad.”
Esa expectativa que nace en ti, es algo que está a punto de pasar sobrenaturalmente porque Dios trabaja sobre esa expectativa. Él sube la barra de las limitaciones y de esa manera, Dios va a cumplir esa expectativa en tu vida. Asi que espere algo grande en este año 2023.
No vea las circunstancias, ponga sus ojos en Cristo Jesús, y no se desvíe para otro lado porque Dios va hacer algo bueno.
2. EL NUEVO AÑO COMIENZA CON UNA OPORTUNIDAD.
Cada vez que tenemos un año nuevo, Dios se asegura abrir nuevas oportunidades para su pueblo, porque lo que sucedió en su vida, fue una preparación para esa oportunidad que Dios tiene para ti.
Quiero decirte que las oportunidades son portales, son ventanas, son puertas que Dios abre para que aferras a esa oportunidad, pero cuando tú no tomas esa oportunidad Dios la cierra. Hoy quiero decirte que en el año 2023, Dios va abrir puertas que tú nunca habías visto abiertas, así que tómelo.
Hay oportunidades que vendrán en forma de una persona. Cuando el gigante Goliat empezó a desafiar al ejército de Israel, aquel decía en alta voz: “yo los voy a matar a todos”. David se dijo: “esta es mi oportunidad de ser rey”, “la voy a tomar”. El rey Saul dijo: “quien se atreve a matar a ese gigante”.
Entonces, David levanto la mano y dijo: “como este incircunciso se atreve a desafiar al ejército de Jehová?”. Así que tomo esa oportunidad, agarro una honda y le lanzo una piedra en la frente del gigante, lo mato y entro a una nueva temporada.
Nuevas oportunidades están abiertas, tu necesitas tomarlas. Pueden venir en forma de nuevas ideas, ideas creativas. Estate listo.
3. DEBEMOS SEGUIR INSTRUCCIONES.
Dios no te introduce a nuevas oportunidades sin instrucciones. LO que viene para el mundo es muy difícil, pero lo que viene para su Iglesia, para su pueblo es glorioso. Tienes que obedecer sus instrucciones, tienes que obedecer lo que dice en su Palabra, la Biblia, medita en ella de día y de noche.
ISAIAS 1:19 “Si quisiereis y oyereis, comeréis el bien de la tierra; 20si no quisiereis y fuereis rebeldes, seréis consumidos a espada; porque la boca de Jehová lo ha dicho.”
En otras palabras, se requiere obediencia. Entra al año nuevo haciendo una decisión de obediencia. Queremos lo mejor de la tierra, entonces obedezcamos a Dios porque si obedeces, comeremos lo bueno de la tierra.
Pero, esto se vuelve real cuando primeramente hacemos a Jesús, Señor y Salvador de nuestras vidas. Por eso, te invito a que hagas la siguiente oración en voz alta: “Padre Celestial, vengo delante de tu presencia, pidiéndote perdón por mis pecados. Ven a morar a mi corazón y has de mí una nueva criatura, que te ame, te exalte, te adore y te bendiga. Hoy te hago Señor y Salvador de mi vida. En el nombre de Jesús. Amén”
Y ahora busca una Iglesia cristiana para que te instruya en la Palabra de Dios.
FUENTE: Gracias Pastor GUILLERMO MALDONADO por sus enseñanzas.