Categoría: Esperaren Dios

Cómo caminar con Dios en tiempos difíciles

Hay momentos difíciles que cada uno de nosotros experimenta cuando estamos abrumados y no sabemos qué hacer. ¿Está usted atravesando por un momento así?. Una cosa es cierta, Todos enfrentamos desafíos en nuestra vida.

Y casi siempre están vinculadas con nuestras relaciones personales, situaciones económicas, familiares, de salud o carrera profesional. En ocasiones, se nos dificulta comprender por qué esas pruebas han ocurrido y puede que nos sintamos agobiados, confundidos y solos.

Mientras estamos en medio de las pruebas, no podemos entender lo que Dios desea alcanzar, pero la Biblia nos asegura que el Señor desea lo mejor para nuestra vida y que obrará incluso en los tiempos más difíciles para nuestro bien.

Como creyentes en Cristo no vivimos en las tinieblas del pecado (Col 1.13). Sin embargo, para que seamos moldeados, el Señor permite que enfrentemos pruebas y tribulaciones. En la historia de José en Génesis 37-39 encontramos seis principios que podemos recordar en tiempos de dificultades.

  1. DIOS ESTÁ CON NOSOTROS EN LOS MOMENTOS DIFÍCILES

Este es el cimiento para poder enfrentar las pruebas. Guiados por sus celos, los hermanos de José tramaron asesinarlo, pero el Señor tocó el corazón de sus hermanos Rubén y Judá. La Biblia afirma que Dios estaba con José en todo momento, desde el instante en el que fue vendido como esclavo, hasta su encarcelamiento. El Señor le prosperó y le dio gracia delante de faraón.

HEBREOS 13:5  Dios declara: “No te desampararé, ni te dejaré”.

No existe un lugar tan lejano, ni una dificultad demasiado grande para que estemos fuera del alcance de nuestro Padre celestial.

SALMOS 139:7-12 «¿A dónde me iré de tu Espíritu?¿Y a dónde huiré de tu presencia?8Si subiere a los cielos, allí estás tú;Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás.9Si tomare las alas del albaY habitare en el extremo del mar,10Aun allí me guiará tu mano,Y me asirá tu diestra.11Si dijere: Ciertamente las tinieblas me encubrirán;Aun la noche resplandecerá alrededor de mí.12Aun las tinieblas no encubren de ti,Y la noche resplandece como el día;Lo mismo te son las tinieblas que la luz.

2. DIOS PERMITE LOS TIEMPOS DIFÍCILES POR UNA RAZÓN.

Sin importar cuán difícil parezca la prueba, si usted es un seguidor de Jesucristo, Dios tiene una buena razón para permitir esa dificultad en su vida. José tenía 17 años cuando fue vendido como esclavo, y no fue hasta tener 30 años cuando llegó a ser gobernador de Egipto. Así que, durante 13 años, tuvo que enfrentar la adversidad.

En ocasiones, cuando sufrimos agravios, desviamos nuestra atención de Dios, para enfocarnos en la situación que enfrentamos o en las personas que nos han maltratado. El Señor tenía un propósito con cada paso que dio José en su rocoso recorrido. En los planes de Dios, José, no solo salvaría a su familia, sino también a todo Egipto durante los 7 años de hambruna. Por eso José les dice a sus hermanos:

GENESIS 50:20 “Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo”.

La dirección soberana de Dios en la vida de José ilustra la verdad que nos enseña en:

 ROMANOS 8:28: “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados”.

3. LA OSCURIDAD DURARA CUANTO SEA NECESARIO PARA QUE DIOS CUMPLA SU PROPÓSITO

Todos nos impacientamos en momentos de dolor. Pero si pudiéramos ver el futuro en medio de la oscuridad, le agradeceríamos al Señor, pues comprenderíamos el propósito de sus pruebas. Fue en medio de lo que José padeció en casa de Potifar y en la prisión como aprendió el lenguaje egipcio y sus costumbres. Y además, adquirió habilidades administrativas, aprendió a vivir bajo autoridad y supo cómo supervisar a otros. Dios lo preparó para que llegara a tener un lugar maravilloso de servicio, como segundo al mando después de Faraón.

Lo que el Señor nunca hizo fue mostrarle su plan, ni el tiempo en el que ocurriría. Así que, aunque quisiéramos acortar las pruebas, tenemos que reconocer que son las dificultades las que nos moldean. No batallemos contra Dios. Más bien rindamos nuestra voluntad al decirle: “Señor, no entiendo esto, ni tampoco es de mi agrado, pero me rindo ante tu propósito, cualquiera que sea. Mantenme en este lugar hasta que lo logres”.

4. A MENUDO, APRENDEMOS MÁS EN LA OSCURIDAD QUE EN LA LUZ

Sin importar en dónde estaba José, ya fuera en el fondo de la cisterna, en la casa de Potifar o en la cárcel, seguía avanzando hacia la luz. Todo ese tiempo Dios lo continuó dirigiendo hacia su divino propósito; José vendría a ser gobernador de Egipto. Su plan no solo salvaría a la familia de José, sino a toda la población de Egipto. Su historia quedaría escrita en la Biblia para enseñanza y bendición.

Todos evadimos tener que aprender por medio de las dificultades, pero las lecciones no se adquieren hasta que no pasamos por ellas. Experimentar nuestra completa dependencia de Dios en medio de las tribulaciones es muchísimo más efectivo que solo escuchar acerca de su fidelidad.

5. AÚN EN LOS MOMENTOS SOMBRÍOS, CAMINAMOS HACIA LA LUZ

Dios tiene un plan perfecto para nuestras vidas. Al confiar en Él y al seguirlo en obediencia podemos cumplir con su plan. Tenemos que obedecerlo aun cuando tomar la decisión correcta se nos haga difícil, o implique un sacrificio. ¿Por qué? Porque es así como nuestro Padre celestial moldea nuestro carácter. Solo la obediencia fiel nos permite crecer en sabiduría y madurez para servirle. No se enfoque en la oscuridad, sino fije su mirada en el Señor. Él no iluminará todo el camino al mismo tiempo, sino que alumbrará lo suficiente para que demos un paso a la vez.

6. LO QUE APRENDEMOS EN LA OSCURIDAD, DEBEMOS COMPARTIRLO EN LA LUZ

José había crecido en una familia que creía en Jehová, pero de pronto se encontró en medio de una sociedad idólatra. Al interpretar el sueño de Faraón, en ningún momento trató de ocultar su fe en el único Dios verdadero (Gn 41.1, 25, 28, 32).

El Señor ha ido edificando sus principios en su vida y desea que comparta con otros dichas verdades. Muchos de los que caminan a nuestro alrededor viven en tinieblas, vanidades, ansiedades y frustraciones. Pero usted debe poner a disposición del prójimo, tanto su vida como las lecciones que ha aprendido en los momentos más sombríos.

FUENTE: Gracias Pastor CHARLES STANLEY por sus enseñanzas

Comentarios

ESCRIBE LA VISIÓN, ESCRIBE TUS METAS

Este año 2023, debe ser un año cuando debemos entrar con grandes expectativas, porque Dios tiene oportunidades que Él va abrir para nosotros, ya sea a traves de una persona o de ideas creativas, pero debemos seguir sus instrucciones y ser obedientes a su Palabra.

Para lo anterior, es importante que establezcamos metas para este nuevo año, las cuales deben ser Medibles, Específicas, con Tiempo de ejecución y Alcanzables. Ya que Dios nos instruye en:

HABACUC 2:2 «Y Jehová me respondió y dijo: Escribe la visión y declárala para que corra el que leyera en ella.«

Aqui se nos indica que debemos escribir nuestras metas, y no solo pensarlas o visualizarlas, porque esta es la manera más adecuada para que Dios pueda actuar y prosperarnos. MIra lo que Él tiene establecido:

3 JUAN 2 » Amado, Yo deseo que tu seas prosperado en todas las cosas, que tengas salud, asi como prospera tu alma.

Presta atención, si tú quieres que este año sea diferente, escribe tu visión, escribe tus metas. Yo no sé si a estas alturas del año ya tienes escritas tus metas, pues de esta manera podemos enfocarnos en ellas y posteriormente evaluarlas para saber si las hemos cumplido y las que no, hacer los ajustes necesarios.

En mi caso particular, las tengo divididas en: Espirituales, Familiares, Profesionales y Personales. Y si tú escribes las tuyas, estoy seguro que Dios bendecirá tu vida y veras la Gloria de Dios de una manera sobrenatural. Te lo hablo por experiencia.

Talves no veamos las metas cumplidas de una solo vez, porque la Palabra de Dios nos dice en:

PROVERBIOS 4:18 » Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto.»

Esto nos quiere decir que tu nuestra prosperidad va en aumento y que la expectativa para el año 2023 sea subir, sea crecer, sea ser prospero.

ENTONCES, QUE DEBEMOS HACER ?

1. TOMESE EL TIEMPO PARA PLANIFICAR.

Dios solo bendice el orden, Él no bendice el desorden. Defina que es lo que quiere en su vida, en su vida personal, en el area financiera, en su vida espiritual, es su vida profesional. Pero defínalo, marque fechas para llevarlos a cabo.

Quiere tener una casa,un empleo, una promoción, quieres viajar, quieres crecer espiritualmente hablando, quieres servir en algún Ministerio de tu Iglesia, en alguna organización de servicio. Te comento esto, porque Dios cuando quiere bendecir a alguien, pregunta: QUE QUIERES?.

Recordemos el ejemplo de Jesucristo cuando venían los ciegos o los leprosos. Claro, Él sabia que necesitaban la vista o ser limpios en sus cuerpos. Pero porque preguntaba ?, porque nosotros tenemos que hacer nuestra parte.

Hasta entonces, hasta que el ciego y el leproso decían que querían, Jesús daba la vista al ciego y sanidad al leproso. Él les decía: De acuerdo a lo que has pedido, te sea dado.

Una vez más, escribe la visión, escribe lo que vas hacer. Esto no es una sugerencia, es una orden.

2. EL AHORRO.

Dice la Palabra de Dios, que unos Fariseos vinieron a Jesús para tentarle y poder asi acusarle, preguntándole: Es liito pagar los impuesto?. Y Jesús les contesto: Dar al Cesar lo que el del Cesar y a Dios lo que es de Dios.

En este sentido, lo primero que tenemos hacer es dar nuestros diezmos a Dios, o sea donde recibimos nuestro crecimiento espiritual, en este casa en la Iglesia en que nos congregamos, porque?, porque hay promesa:

MALAQUíAS 3:10-11 » Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde. Reprenderé también por vosotros al devorador, y no os destruirá el fruto de la tierra, ni vuestra vid en el campo será estéril, dice Jehová de los ejércitos.

Podemos ver que al traer los diezmos a Dios, no solo recibiremos bendiciones hasta que sobreabunda, sino que también, Dios reprenderá por nosotros al devorador, al que retraza nuestras bendiciones, al que trae enfermedad a nuestras vidas, al que trae discordias, tristeza, depresiones, etc.

Y así como en otras culturas, se les enseña el hábito del ahorro, nosotros también debemos ahorrar al menos el 10% de nuestros salarios o ingresos. Sino miremos las hormigas, se abastecen durante la época de abundancia para época de escasez. De eso se trata, del ahorro. Sobretodo en esta temporada de crisis, de recesión económica.

3. SEA AGRADECIDO CON DIOS CADA DÍA.

Siempre demos gracias a Dios porque eso es agradable a Él. Recibes tu paga, dale gracias a Dios, recibió un milagro, dele gracias a Dios, se graduó uno de sus hijos, dele gracias a Dios, recibió su sanidad, dele gracias a Dios.

Porque cuando damos gracias a Dios, estamos garantizando un segundo y mayor favor que el primero. Sino veamos, la historia de los 10 leprosos.

LUCAS 10:15-19 » 15Entonces uno de ellos, viendo que había sido sanado, volvió, glorificando a Dios a gran voz, 16y se postró rostro en tierra a sus pies, dándole gracias; y este era samaritano. 17Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y los nueve, ¿dónde están? 18¿No hubo quien volviese y diese gloria a Dios sino este extranjero? 19Y le dijo: Levántate, vete; tu fe te ha salvado

Este que había sido sanado de la lepra, fue el único delos 10 que regreso y se postró. Jesús le manifestó, como tu regresaste a dar gracias a Dios, Levántate, vete, tu fe te ha salvado.

Ahora mismo como una forma de manifestar mis agradecimientos, he comprado un cuaderno, donde cada día escribo las cosas por las cuales estoy agradecido cada día y lo hago antes de irme a la cama.

4. ADQUIERE CONOCIMIENTO.

QUE CONOCIMIENTOS VAS ADQUIRIR ESTE AÑO?. Por lo menos lee la Biblia, pero planifíquelo, establezca a que horas lo va hacer, conque Libro de la Palabra vas a comenzar. Te recomiendo el Libro de San Juan. Lee un capítulo cada mañana, medita en ello,.

En mi caso, como testimonio, no solo leo la Palabra, en 4 diferentes Libros, sino que me he propuesto aprender de memoria un versículo cada semana. Ya lo comencé, pero lo maravilloso, es que me he encontrado con capítulos que me llaman mucho la atención y me los estoy memorizando completos.

Además, e he propuesto leer un capítulo de un libro cristiano cada día/cada semana y lo estoy haciendo.

Profesionalmente, aunque tengo Grados de Maestrías, quiero actualizarme en el area de Finanzas Corporativas, Como Vender en Amazon. De hecho ya tomé un seminario de este tema en la Camara de Comercio de Madrid. Lo interesante es que ahora mismo tengo 69 años, y te lo menciono porque estoy expectante de lo que Dios hará este año, y si estoy preparado, Dios me va a dar oportunidades para desarrollarme en eso y hacer que mi vida tenga mayor sentido y propósito y asi ver la Gloria de Dios es esas actividades.

Te podría comentar otras cosas que profesionalmente estoy haciendo por asunto de tiempo, no te lo puedo explicar, sin embargo, iré compartiendo a lo largo de este año.

Planifíquese, tome su tiempo, porque sino lo haces, no lo vas a hacer.

4. LA ORACIÓN.

QUE TIENE PLANIFICADO EN LA ORACIÓN?, TIENE UN TIEMPO DIARIO DE ORACIÓN? Esto es vital, porque ese tiempo es el fundamento diario de todo el año. Planifíquelo. He decidido que mi tiempo de oración sea más apasionante. Además de tener un tiempo de oración una vez a la semana conjuntamente con mi esposa y nos vamos a centrar a orar por las metas.

Donde parte de ese tiempo de oración es para orar por las personas que aun no conocen y que Dios nos de ideas de cómo compartir la Buenas Nuevas del Evangelio con ellas.

Les quiero comentar que comencé mi tiempo de oración desde hace 44 años y ha sido lo máximo. Hemos visto la mano de Dios sobretodos nuestros asuntos de la vida, incluyendo aquellos tiempos dificles, de pruebas, pero trayendo cada cosa a los pies de Dios. Y siempre nos ha mostrado el camino, o nos ha fortalecido, dado paz, protección y provisión.

LUCAS 18:3-8 » 3Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él, diciendo: Hazme justicia de mi adversario. 4Y él no quiso por algún tiempo; pero después de esto dijo dentro de sí: Aunque ni temo a Dios, ni tengo respeto a hombre, 5sin embargo, porque esta viuda me es molesta, le haré justicia, no sea que viniendo de continuo, me agote la paciencia. 6Y dijo el Señor: Oíd lo que dijo el juez injusto. 7¿Y acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman a él día y noche? ¿Se tardará en responderles?.

Les aseguro que así como Nuestro Dios respondió a esa petición de esa viuda, así Nuestro Señor, nos responderá.

6. SER DILIGENTE

Negligente es aquel que sabiendo hacer lo que hacer lo que tiene que hacer, no lo hace. Eso es ser alocado.

Pero un diligente es perseverante, un persistente, es enfocado. Asi que si sabes que tienes que ahorrar, sabes que tienes que diezmar, sabes que tienes que planificar, sabes que tienes que orar, que tienes que leer y no lo haces. Solo tu tienes la respuesta y nadie más.

Que este año marque la diferencia, que este año veas el sol de la aurora, aunque sea un poquito. Alguien decía: «tu no tienes la culpa donde naciste, pero sí tienes la culpa de quedarte así como estas.»

Señores, vamos a ver la Gloria de Dios porque nuestra vida será el producto de una vida ordenada, planificada, dándole a Dios lo que es de Dios, orando, instruyéndonos, sirviendo, pero planificando. Y le aseguro que su vida no será igual.

OREMOS, acompáñame y di en voz alta: » Señor, gracias por tu palabra, vamos a a experiencia de un nuevo año, una nueva oportunidad que nos estas dando, y sé que, dentro de tu misericordia, está que lo terminemos diferente, en una condición mejor. Tú sabes cómo esta mi vida, en el área espiritual, familiar, profesional y personal. Pero quiero declarar que este año es un año diferente, hoy, marca la diferencia en mi vida. En el nombre de Jesús. Amén.»

FUENTE: Gracias Pastor ARTURO LOPEZ MALUMBRES por sus enseñanzas.

Comentarios

ESPERANDO EL TIEMPO DE DIOS

La voluntad de Dios incluye Su tiempo. Él tiene un plan asombroso trazado para cada uno de nosotros, pero solo lo revela paso a paso. Cuando seguimos Su plan, Él es glorificado y nosotros satisfechos. Sin embargo, si no buscamos la guía del Señor todos los días, terminaremos automáticamente siguiendo nuestro propio curso. Como resultado, estaremos confundidos e insatisfechos porque nos hemos perdido lo que Dios tenía la intención de darnos y hacer a través de nosotros.

Lo más sabio que podemos hacer es comenzar cada día conectándonos con Dios todopoderoso.

Aunque ya estamos unidos con el Padre a través de Jesucristo, todavía necesitamos comunicarnos con Él diariamente para desarrollar una relación íntima. En lugar de acudir a Él solo en momentos de emergencia o necesidad, debemos comenzar cada mañana pidiéndole que nos ayude a caminar sabiamente, sin retrasarnos ni adelantarnos a Su plan.

QUE SIGNIFICA ESPERAR EN EL SEÑOR?

David fue un hombre que eligió vivir de acuerdo con el plan y el horario del Señor. Aunque fue ungido a la edad de 16 años, en realidad no se convirtió en Rey de Israel hasta 14 años después. La promesa de Dios era segura, pero David desconocía el momento. Tuvo que esperar, y gran parte de ese tiempo lo pasó escondiéndose y huyendo del rey Saúl, que continuamente intentaba matarlo.

  • Dios usa las demoras para prepararnos para sus planes. David aprendió lecciones valiosas durante esos años difíciles que lo prepararon para su futuro papel como rey. De la misma manera, Dios usa nuestras heridas, pérdidas y desilusiones para producir cualidades de carácter que necesitaremos para cumplir Su plan para nuestras vidas.
  • Esperar en Dios es una quietud activa. No significa que detengamos abruptamente toda actividad y no hagamos nada. Cuando el Señor está provocando un cambio en nuestra vida, quiere que sigamos siendo productivos, mientras observamos y esperamos más dirección.
  • Esperar en Dios tiene un propósito. A menudo pensamos que el plan del Señor para nuestra vida está al otro lado de la demora, pero a Sus ojos, el proceso de espera es una parte esencial de Su propósito. Saber esto nos permite esperar con un sentido de dirección y expectación. Dios sabe cuándo estamos dispuestos a aceptar sus respuestas. Si escuchamos, Él revelará el siguiente paso cuando estemos listos. Si se demora, debemos reconocer que su tiempo es perfecto y que lo mejor no siempre llega pronto.

Este es Su procedimiento habitual con nosotros y no una dificultad cruel o innecesaria.

Salmo 25:1-3. A ti, oh Jehová, levantaré mi alma. Dios mío, en ti confío; No sea yo avergonzado, No se alegren de mí mis enemigos. Ciertamente ninguno de cuantos esperan en ti será confundido.

Dios promete que no seremos decepcionados ni avergonzados cuando confiemos en Él.

Salmo 37: 7-9, 34 » Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades. Deja la ira, y desecha el enojo; No te excites en manera alguna a hacer lo malo. Porque los malignos serán destruidos, Pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra….Espera en Jehová, y guarda su camino, Y él te exaltará para heredar la tierra; Cuando sean destruidos los pecadores, lo verás.

El Señor nos dice que no nos inquietemos porque Él nos está cuidando. Si estamos dispuestos a caminar obedientemente con Él de acuerdo a Su tiempo, Él proveerá todo lo que necesitemos. Incluso si no hemos estado siguiendo el plan de Dios para nuestras vidas, Él está dispuesto a recogernos justo donde estamos, perdonarnos por todo el tiempo perdido y darnos un nuevo comienzo.

Isaías 64:4 » Ni nunca oyeron, ni oídos percibieron, ni ojo ha visto a Dios fuera de ti, que hiciese por el que en él espera»

No importa lo que estemos enfrentando, podemos saber que Dios siempre actúa a favor de aquellos que esperan en Él. Como Él es el Dios omnisciente, omnipotente y soberano del universo, Él puede hacer lo que nadie más puede hacer y siempre trabaja para nuestro bien.

PORQUE DIOS QUIERE QUE ESPEREMOS?

Las razones del Señor para la demora son siempre para nuestro bien, en orden:

1. Para recibir Su dirección clara.

Sin saber el futuro, a veces podemos impacientarnos, pensando que perderemos algo bueno si no actuamos ahora. Sin embargo, lo que Dios ha planeado para nuestra vida ya lleva nuestro nombre. No hay manera de que podamos perder nada si lo seguimos. Él nos ha dado Su Palabra y Su Espíritu para enseñarnos y guiarnos. Al prestar atención a Su instrucción, somos conformados a la imagen de Cristo y capacitados para caminar obedientemente en Su voluntad y de acuerdo a Su horario.

Para mantenernos al paso con Su tiempo. El Señor nunca tiene prisa. Él creó el tiempo y ha planeado todo a la perfección. Sin embargo, Él no nos revela todo cuando lo queremos. Incluso cuando le hemos pedido conforme a Su voluntad, y Él nos ha dado una confirmación en nuestro espíritu acerca de algo que Él quiere hacer en nuestras vidas, no podemos presumir de saber cuándo sucederá. A veces lo retiene porque no estamos listos para recibirlo. Ahí es cuando debemos confiar en que sus caminos y tiempos son los mejores.

2. Para probar nuestra fe.

Ya tenemos todas las bendiciones que Dios nos ha prometido, pero a veces Él las restringe hasta que confiamos en Él. Él quiere que creamos en Él incluso cuando no podemos ver claramente los detalles de esas bendiciones.

3. Para fortalecer nuestra fe.

Esperar nos enseña a caminar por fe, confiando en el tiempo de Dios en lugar de ceder a la auto-gratificación inmediata. Tamizar los motivos de nuestros deseos. A veces oramos egoístamente, solo para descubrir cuán tontos fuimos en nuestra petición.

La demora de Dios en contestar nuestras oraciones nos da tiempo para ver las situaciones desde Su punto de vista.

COMO DEBEMOS ESPERAR?

El Señor quiere que nos beneficiemos de nuestros tiempos de espera respondiendo correctamente. En lugar de volvernos impacientes, nerviosos, frustrados o miserables, debemos seguir estos ejemplos bíblicos de cómo esperar:

Pacientemente. “Descansa en el Señor y espéralo con paciencia” (Sal. 37:7).
En silencio. “Mi alma espera en silencio sólo en Dios” (Salmo 62:1).
Con confianza. “No te inquietes” (Sal. 37:7).
expectante “Hubiera yo desfallecido si no creyese que veré la bondad del Señor” (Sal. 27:13).
Con firmeza y valentía. “Espera en el Señor; esfuérzate y cobra ánimo tu corazón” (Sal. 27:14).
De pie sobre la Palabra de Dios. “Espero en el Señor. . . y en su palabra espero” (Salmo 130:5).

FUENTE: Gracias Pastor CHARLES STANLEY por sus enseñanzas.

Comentarios

YouTube