Categoría: Propósito

DIOS SIGUE EXTENDIENDO SU MANO PROTECTORA

Dios sigue obrando con poder en medio de los tiempos. Dios no ha cambiado, sigue siendo el mismo ayer, hoy y por siempre. Le animo a que siga creyendo y siga edificando su vida.

Una de las actividades que me toca hacer como padre de familia es, leer todos los días antes de dormir, un pasaje de la Biblia con mi hijo de 8 años, ya leímos los evangelios y ahora nos adentramos en el Libro de los Hechos, es como la continuación de la historia, luego que Jesús subiera al cielo y viniera sobre ellos el Espíritu Santo.

Cada historia es fascinante y desafiante, algunos dicen que los 28 capítulos del libro de Hechos quedaron inconclusos, porque pareciera que no tiene un cierre tal cual, y por eso los cristianos de hoy debemos seguir escribiendo el capítulo 29 de los Hechos.

En el capítulo 4 encontramos registro de una oración que los apóstoles hacen pidiendo a Dios confianza y valor ante la situación que enfrentaban.

HECHOS 4:23-31 “Y puestos en libertad, vinieron a los suyos y contaron todo lo que los principales sacerdotes y los ancianos les habían dicho. Y ellos, habiéndolo oído, alzaron unánimes la voz a Dios, y dijeron: Soberano Señor, tú eres el Dios que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay; que por boca de David tu siervo dijiste:

¿Por qué se amotinan las gentes, Y los pueblos piensan cosas vanas? Se reunieron los reyes de la tierra, Y los príncipes se juntaron en uno Contra el Señor, y contra su Cristo.

Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo Hijo Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel, para hacer cuanto tu mano y tu consejo habían antes determinado que sucediera. Y ahora, Señor, mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra, mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús. Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de DIOS.

Quiero llamar la atención de tres aspectos que nos deben desafiar para orar con propósito y edificar nuestra fe y hacerla fuerte ante los tiempos difíciles que enfrentamos hoy en día.

  1. DIOS ES SOBERANO. Y ellos, habiéndolo oído, alzaron unánimes la voz a Dios, y dijeron: Soberano Señor…

De esto debemos ser entendidos: DIos es soberano, ¿que significa? Que nuestra mente finita, no puede ordenarle a Él, como hacer y cómo obrar. Dios es el que tiene control absoluto de todo. Sin embargo, es un control de amor, nos llena con su presencia y nos guía por sendas de justicia.

a. Dios sigue en control. A pesar de lo que estaban atravesando los discípulos, ellos reconocen la majestad de Dios, el Creador de todas las cosas. Si Él puede hacer de la nada todas las cosas definitivamente, podía ayudarles ante las dificultades. Dios sigue en control, por duro el panorama, el sigue en control.

b. Dios sigue en su trono. Nada mueve a nuestro Dios de su posición como Rey y amo. El es digno de adoración, de exaltación. Y usted y yo somos llamados a adorar con nuestra vida, con nuestra adoración, con nuestra obediencia sobre todo, y por supuesto poniendo toda nuestra fe en Él. Toda nuestra vida con sus problemas y sinsabores, no hacen que Dios pierda ni siquiera un poco de la esencia de quién es.

c. Dios es nuestra fortaleza. En tiempos de necesidad debemos acudir a Dios, en tiempos de angustia debemos acudir al Señor, es nuestro primer y último refugio, es nuestra única opción, y es nuestra completa seguridad.

2. DIOS ES NUESTRA FUENTE DE CONFIANZA Y SEGURIDAD.

Los discípulos experimentaron en ese momento la persecución y el rechazo, por causa del nombre de Jesús. Puede que usted y yo experimentemos ese tipo de rechazo, por nuestro entorno. Puede ser que lo vean de menos, o directamente lo rechacen, pero como dice el:  

SALMOS 73:25 ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de ti nada deseo en la tierra.

a. Dios no es ajeno a nuestros desafíos. Me encanta la manera de orar de los discípulos. Son específicos, y directamente le dicen al Señor: Y ahora, Señor, mira sus amenazas,

Cuando oremos seamos específicos al hacerlo, seamos directos con el Señor. Si tiene temor, dígale al Señor: Tengo temor Señor; si tiene tristeza, dígale al Señor; ¿está enojado? Háblelo con el Señor… él escucha nuestra oración.

b. Dios sigue dando fortaleza. Los discípulos piden fortaleza. Piden renovar fuerzas, mire que no pide que quite la dificultad, piden ánimo. Porque probablemente los problemas no se solucionen, de la noche a la mañana, pero sí podemos pedir fortaleza para este momento, para cada instante.

c. Dios pone su Palabra en nosotros. (denuedo) Los discípulos pidieron fortaleza y ánimo, con un solo propósito, seguir siendo mensajeros del Evangelio. Si su deseo de bienestar, si su deseo de poder de Dios, no es para otra cosa que testificar de Dios, entonces nada va a ocurrir. Dios nos fortalece, nos equipa, y nos usa, para alcanzar a otros con su amor y servir a los demás. Pida fortaleza, pida poder de Dios pero para seguir sirviendo al Señor con todo el corazón…

3. DIOS SIGUE EXTENDIENDO SU MANO PROTECTORA.

Dios no ha dejado de obrar en nuestro favor. Dios no ha cesado de hacer justicia, Dios no ha dejado de sanar, Dios no ha dejado de escuchar nuestro clamor. Dios sigue siendo Dios y Él no cambia ni cambiará. Los discípulos en el pasaje que estamos viendo y meditando, dicen: mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús. Ellos estaban convencidos de que Dios responde con poder y gran beneficio para su pueblo.

a. La mano de Dios se extiende para obrar en favor de sus hijos. Dios no ha acortado su mano. Si hay algo que debemos pedir es como dijo el profeta Habacuc:

HABACUC 3: 2 » Oh Jehová, he oído tu palabra, y temí. Oh Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos, En medio de los tiempos hazla conocer; En la ira acuérdate de la misericordia.

b. Aún se operan milagros. ¡Estamos vivos! Siempre que tengo la oportunidad de saludar a mi buen amigo y hermano Manuel Girón, al momento de saludarnos, la pregunta es: ¿Cómo está hermano? Y él me contesta: ¡Estamos vivos, y eso es un milagro! Cuanta verdad hay en eso, no percibimos los pequeños milagros que a cada instante ocurren en nuestro favor, vimos la luz del sol, ya el hecho que podamos ver es un milagro, o tuvimos la oportunidad de hacer nuestras actividades… etc. Dios sigue operando milagros. Dios sigue obrando para bendecirnos.

c. Su mano se extiende para usarnos con poder. Nuestra oración es úsanos Señor, cuando era niño, había un canto que se cantaba en la parroquia de mi comunidad, que era una Oración de San Francisco de Asís que decía:

Señor, hazme un instrumento de Tu paz.

Que donde haya odio, siembre yo amor; donde haya injuria, perdón;

donde haya duda, fe;

donde haya tristeza, alegría;  donde haya desaliento, esperanza;

donde haya sombras, luz.

¡Oh, Divino Maestro!

Que no busque yo ser consolado sino consolar; que no busque ser amado sino amar;

que no busque ser comprendido sino comprender; porque dando es como recibimos;

perdonando es como TÚ nos perdonas;

y muriendo en TI, es como nacemos a la vida eterna.

Si usted y yo no anhelamos el poder de Dios para bendecir a otros, si no anhelamos tener poder de Dios, para Glorificar a Dios, con nuestras vidas, entonces habremos perdido nuestro propósito y sentido. Nuestra oración debe ser, extiende tu mano Señor, para que me uses para tu Gloria.

Conclusión: Dios sigue extendiendo su mano protectora. Dios sigue obrando en nuestro favor. Dios continúa haciendo milagros. La pregunta es: ¿Qué haremos para dejarnos usar por el Señor? ¿Estamos dispuestos a dejarnos usar? Yo espero que sí. Dios desea usar a cada uno de nosotros en estos tiempos tan complicados y llenos de dificultades, para que los que nos rodean también puedan gustar y ver las bondades de nuestro Dios. Dios les bendiga a todos.

FUENTE: Gracias Pastor DORIAN BANEGAS por sus enseñanzas.

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COMO COMIENZAS EL AÑO 2021

Señor, gracias te damos por tu fidelidad, tu bondad, amor y misericordia hacia nosotros y porque tu nombre es verdadero y tu Palabra es verdad. Y no hay duda que tú has sido fiel, por lo que te damos la Gloria a ti nuestro Salvador Jesucristo, y es por eso que podemos decirte que te amamos con todo nuestro corazón, pues tu nos formaste, nos creaste y conoces nuestro futuro.

ASI DEBEMOS COMENZAR EL AÑO 2021

  1. Con EXPECTATIVAS de que algo bueno va a suceder a nuestro favor. No con tristezas, no con desánimos, sino expectantes de que algo bueno viene a nosotros, poniendo como base la fe en nuestro Dios.
  2. Esa fe dará como resultado OPORTUNIDADES. Y vendrán en forma de algo, o alguien, o lugar, o cosa. Por lo tanto, puedo declarar que las oportunidades vienen a mí en el 2021.
  3. Para esto debemos seguir INSTRUCCIONES. a) Dejar lo que queda atras para impulsarnos a lo nuevo. b) Poner a Dios en primer lugar, dándole la primera ofrenda, el primer ayuno, la primera oración del día, los primeros frutos y entonces tendremos garantizado un año glorioso porque Dios tiene nuestro futuro en sus manos.

El año 2020 fue el año de la preparación del remanente, fue un año de pruebas, de sacudimiento personal, familiar, Iglesia y global. Fue el comienzo de la Iglesia apostata, fue el año del reset, fue un año de madurez, pero el Señor nos protegió. Fue un año de guerra espiritual en las finanzas, la salud, los hijos, y fue el año del comienzo de señales de acuerdo a la siguiente lectura.

MATEO 24: 7-8 » Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares. Y todo esto será principio de dolores.»

PREDICCIONES PARA LOS PROXIMOS AÑOS Y EN EL 2021

  1. El número 2021 es el año para ser limpio de nuestra pecaminosidad. Es el año para purificar nuestros corazones y santificar nuestras vidas. Y para ello, Dios nos dio el fuego fresco en el día de Pentecostes del 2020 . Por lo tanto el 2021 será el año de la limpieza y santificación por el fuego del Espíritu Santo. Donde veremos liberaciones masivas, sobretodo de la pecaminosidad.
  2. Las señales se van a intensificar para la segunda venida de Cristo. La plaga del COVID-19 seguirá en la tierra y terminará como un catarro o gripe. Por lo tanto, sigamos con las prácticas de bioseguridad, protejamos nuestro sistema inmunológico y apliquemos la Sangre de Jesús cada día, porque las profesias apuntan hacia la segunda venida de Cristo Jesús. Y mientras no haya arrepentimiento vendrán otras plagas.
  3. El 2021 será el año de la recuperación. Recuperaremos lo que hemos perdido en el 2020, las finanzas, la salud, las fuerzas, etc. No será para todo el mundo, sino para el remanente, es decir, los que obedecen la Palabra de Dios.
  4. El 2021 será el año del rompimiento, para todos los que han sido procesados, a los que han pasado por pruebas y no han comprometido la verdad en el 2020.

COMO HACER LA TRANSICIÓN DE LO VIEJO A LO NUEVO.

  1. No os acordeis de las cosas pasadas.

ISAIAS 43:7-8 » No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas. 19He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad.

No te acuerdes del pasado. Es importante que tu corazón deje el pasado, porque de lo contrario repetirás el mismo ciclo del año 2020. Pero para ello tienes que cambiar de mentalidad, de vida, de corazón, y Dios no te mete en la nueva temporada hasta que cambies tu corazón.Caso contrario te quedarás estancado.

2. Tenemos que caminar en fe. Debemos abrazar la fe, renunciar a lo que paso en el 2020 y tenemos que hacer lo que Dios nos dice en este mensaje.

3. Necesitas romper las ataduras del alma que no son de Dios. Con personas que son un daño a tu vida espiritual, con lugares que te contaminan o con cualquier otra cosa que nos aleja de Dios. Necesitas romper con las ligaduras emocionales que no son de Dios.

4. La clave para entrar en lo nuevo es la obediencia. Porque la obediencia va acelerar el ciclo de Dios en tu vida.

OREMOS: Padre celestial, he oido tu Palabra que nos ha hablado el Espíritu Santo atravez de este mensaje. Yo la recibo y declaro que este año será un año de recuperación, de rompimiento, de limpieza y purificación. Renuevo mi pacto de buscarte a ti. Rompo toda atadura del alma que no son de Dios, ahora mismo, los rompo, y hago la transición a lo nuevo. En el nombre de Jesús. Amén.

FUENTE: Gracias Pastor GUILLERMO MALDONADO por sus enseñanzas.

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LUCHA POR EL DOMINIO PROPIO

¿Existe algún aspecto de su vida que esté fuera de control? Pueden ser problemas económicos o de inmoralidad, relaciones con otras personas, actitudes, hábitos, chismes, o pereza.

La falta de dominio propio en cualquier aspecto de la vida no concuerda con quienes somos en Cristo. El deseo del Señor es que vivamos en completa sumisión a Él, para que su Espíritu produzca en nosotros dominio propio.

Si luchamos con Dios por el control de nuestra vida, sufriremos de estrés, ansiedad e infelicidad al estar en desacuerdo con Él. Cada vez que permitimos que nuestros deseos e impulsos nos controlen, nos privamos del descanso, la paz y el gozo del Señor.

¿Lucha con algunos de estos deseos?

  • Aceptación. ¿Qué tan grande es su deseo de ser aceptado por quienes le rodean?
  • Amor. ¿Es este un factor determinante en sus decisiones?
  • Placeres. ¿Se deja dominar por aquello que parece divertido y le hace sentir bien?
  • Sexo. ¿Tiene deseos sexuales que van más allá de los límites que Dios ha establecido?
  • Riqueza y seguridad. ¿Es esto una prioridad en su vida?
  • Logros. ¿Su deseo de sobresalir está fuera de control?
  • Notoriedad y fama. ¿Busca obtener prestigio sin importarle el costo?
  • Felicidad. ¿Qué está dispuesto a realizar con tal de sentirse feliz?
  • Atractivo. ¿Se ha dejado consumir por el deseo de lucir mejor que otros?
  • Control. ¿Anhela controlar la vida de otros o alcanzar una posición de poder y autoridad?
  • Aceptación propia. ¿Se siente descontento con la manera en la que Dios le creó?

La carne contra el Espíritu

El dominio propio consiste en pensar antes de actuar y en considerar las posibles consecuencias. Es un aspecto del fruto del Espíritu que contrasta con las obras de la carne.

• Las obras de la carne.

GALATAS 5:19-22 “Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios”

Esta es una lista de acciones que no son del Espíritu Santo, sino de la naturaleza pecaminosa y carnal. Nos advierte que aquellos que practican tales obras no verán el cielo. No se trata de haberlos cometido en el pasado o de no haber resistido a la tentación en alguna de estas áreas. La palabra clave para comprender esta porción bíblica es “practican”. Es decir, se refiere a las personas que han hecho del pecado un hábito constante, un estilo de vida, o una identidad. Tales personas no son verdaderas cristianas, pues quienes viven continuamente en pecado no son salvos de verdad.

• El fruto del Espíritu.

GALATAS 5:22-23 “Más el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza” .

Estas son características que resultan de la obra del Espíritu Santo en la vida de aquellos que han recibido a Jesucristo como Señor y Salvador. Aquellos que tienen estas cualidades contrastan con la sociedad que los rodea, pues son atributos semejantes a los de Cristo. Hay lugares a los que nunca irán, actividades en las que no participarán y cosas que no verán, porque hacerlo no encajarían con quienes son en Cristo.

Todos los que han sido salvos de verdad le dan la espalda al pecado. Aunque eso no significa que nunca más pecarán, sí han renunciado a su antiguo estilo de vida. Viven comprometidos a obedecer al Señor y a avanzar en su camino, no en las obras de la carne. A medida que se someten al Espíritu Santo que mora en ellos, Él produce su fruto que es reflejo de Cristo y una bendición para el creyente.

La batalla comienza cuando los creyentes en Cristo deseamos hacer lo correcto, pero sentimos que algo nos empuja en la otra dirección. La única manera de romper con esa tensión es rendirnos ante el Señor, confesando nuestro pecado y cediendo el control de nuestra vida a Dios. Si nos negamos, vendremos a ser esclavos del pecado y nos perderemos las bendiciones y recompensas que produce la obediencia.

Quizás nos parezca imposible renunciar al pecado que nos esclaviza, pero no lo es si el Espíritu Santo mora en nosotros. Él nos fortalece para alejarnos de la tentación y para entregarnos a Dios. Cuando su Espíritu tiene el control de nuestras acciones y pensamientos, podemos pensar antes de actuar y tener las fuerzas para hacer su voluntad.

LA CLAVE DEL DOMINIO PROPIO.

  • El dominio propio requiere que pensemos antes de actuar. De no hacerlo, nos lamentaremos después.
  • Debemos tener un firme deseo de obedecer a Dios. Si no obedecemos, no podremos vencer la batalla interna con el pecado, ni vivir en santidad.
  • Tenemos que creer que el Espíritu Santo nos facultará. La sociedad pecaminosa en la que vivimos no tiene por qué vencernos, pues no peleamos esta batalla solos. El Espíritu de Dios nos capacitará para que podamos renunciar al pecado y vivir en sumisión a Él.

AL SER TENTADOS, DEBEMOS HACERNOSLAS SIGUIENTES PREGUNTAS:

  • ¿Cómo nos afectará espiritualmente?
  • ¿Cómo nos afectará económicamente?
  • ¿Cómo afectará nuestra salud?
  • ¿Cómo afectará la manera en que otros nos ven? ¿Podrán vernos como creyentes con un compromiso genuino con el Señor, o como personas que proclama ser cristianos, pero que no viven como tales? ¿Es el fruto del Espíritu evidente en nuestra vida?
  • ¿El pecado que nos tienta es mejor que recibir las bendiciones que Dios ha preparado para nuestra vida?

NO SE DEJE ENGAÑAR.

Andar en el Espíritu y expresar su fruto no siempre es fácil, aunque es la voluntad de Dios. Además, serias y dolorosas consecuencias nos aguardan si cedemos al pecado. El apóstol Pablo advierte acerca de esto en:

GALATAS 6:7 : “No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará”.

Afirmar que Cristo es nuestro Salvador y luego vivir como nos plazca es burlarse de Dios, lo cual produce una cosecha dolorosa de lo que hemos sembrado. Sin embargo, vivir en obediencia al Señor produce una gran cosecha de justicia y del fruto del Espíritu en nosotros.

OREMOS: Padre celestial, hoy vengo delante de ti, humillado a pedirte que perdones mis pecados. Hoy hago un compromiso de seguir tus mandamientos y preceptos. Ven a morar a mi corazón y has de mi una nueva criatura que te ame con todo mi corazón. Te lo pido en el nombre de Jesús, amén.

FUENTE: Gracias Pastor CHARLES STANLEY por sus enseñanzas.

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¿PREOCUPADOS SOLO POR EL PAN?, CUANDO PERDEMOS DE VISTA LO REALMENTE IMPORTANTE.

Llevamos 215 días de pandemia en Honduras. ¿Se ha preocupado? ¿Tenía planes? ¿Ha dudado? ¿Se ha sentido confundido?

Yo puedo responder, sí, a todas esas preguntas. Es que como personas con una naturaleza pecaminosa, es muy fácil, olvidar que tenemos un Dios Todopoderoso. Somos como el pueblo de Israel justo después de haber cruzado el mar Rojo. Este pueblo vio, la columna de nube en el día, y la columna de fuego en la noche, con estos dos portentos podían caminar de día y de noche y poder escapar de la ira del faraón. Luego vieron abrirse al Mar Rojo, vieron cerrarse el Mar Rojo y con ello tragarse a los enemigos que les perseguían. Cantaron y bailaron por esa victoria, pero rápidamente olvidaron todo el favor de Dios para enfocarse en saciar el deseo de comer las cebollas y la comida egipcia.

A veces se nos olvida de dónde nos sacó el Señor. Vamos a la Palabra y descubramos juntos los tesoros de la Palabra de Dios:

M​ARCOS 8:14-21 «Habían olvidado de traer pan, y no tenían sino un pan consigo en la barca. Y él les mandó, diciendo: Mirad, guardaos de la levadura de los fariseos, y de la levadura de Herodes. Y discutían entre sí, diciendo: Es porque no trajimos pan. Y entendiéndolo Jesús, les dijo: ¿Qué discutís, porque no tenéis pan? ¿No entendéis ni comprendéis? ¿Aún tenéis endurecido vuestro corazón?, ¿Teniendo ojos no veis, y teniendo oídos no oís? ¿Y no recordáis?. Cuando partí los cinco panes entre cinco mil, ¿cuántas cestas llenas de los pedazos recogisteis? Y ellos dijeron: Doce. Y cuando los siete panes entre cuatro mil, ¿cuántas canastas llenas de los pedazos recogisteis? Y ellos dijeron: Siete. Y les dijo: ¿Cómo aún no entendéis?»

El mensaje central de este pasaje y la idea que debe permanecer en su mente es: D​ios es todo en mi vida, nada es más importante que Dios, y no me dejaré llevar por la corriente de este mundo.

A. Estamos enredados en la vida cotidiana y olvidamos lo trascendental.

Jesús va con los discípulos en la barca, y trata de enseñar verdades profundas, “cuídense de la levadura de los fariseos y de la levadura de Herodes. La levadura afecta a toda la masa, recuerde que para el pueblo de Israel la levadura era símbolo de impureza, en la Pascua se comía pan sin levadura, simbolizando la pureza. Jesús divide las levaduras: la de los fariseos y la de Herodes… ambas terribles, hipocresía, maldad, crueldad, etc.

  1. Es importante cuidar de nuestro diario vivir, pero no es lo determinante. Si usted no trabaja, no tiene derecho a comer, dice la Palabra. Pero no puede enfocarse solo en el trabajo. Debe guardar un balance.
  2. Por cuidar lo temporal, descuidamos lo eterno. Nos enredamos en lo que perece, lo banal de la vida, los afanes del mundo, y nuestro enfoque se pierde de lo realmente importante lo eterno. ​Colosenses 3:2 Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.
  3. Por ocuparnos de trivialidades, no escuchamos al maestro. Qué fácil es decir: “los discípulos peleando, quién había olvidado comprar la comida del viaje” Pero, ¿acaso nosotros no nos enfrascamos en discusiones sin sentido por qué vestir o qué comer? Jesús hablando, y nosotros discutiendo sobre si comemos pizza o pollo o sopa… Terminamos como Marta, la hermana de Lázaro, y el maestro con ternura nos llama la atención y nos dice:​ …afanados y turbados están con muchas cosas. Lucas 10:41

B.  Jesús demanda poner prioridades.  Y​ a no es tiempo de discutir cosas sin sentido trascendental. Creo que una de las cosas en estos tiempos, es valorar lo realmente importante. Hay prioridades, usted y yo dijimos, más de una vez, no tengo tiempo, ¿pues que cree? A la fuerza nos dieron más tiempo… nos obligaron a encerrarnos, nos obligaron a cuidarnos, si hay tiempo. Y si eso es en lo terrenal, cuanto más en lo espiritual, pero la cuestión es llevar mi vida espiritual, esa que está alineada a Jesús, a que afecte positivamente mi vida terrenal. Cuando pongo a Dios en primer lugar, no me preocupa que comeré, o si tengo o no tengo para pagar la factura de energía, no me malentienda, trabaje duro para sus compromisos, pero no ponga su confianza en su fuerza, ni en su trabajo, sino que ponemos nuestros ojos en Jesús.

  1. Abramos el entendimiento. ¿​ Acaso no entienden? Preguntó el Maestro, la pregunta sigue vigente y sigue haciéndose.
  2. Requiere humildad y entrega. N​ o lo sabemos, ni lo podemos todo. Necesitamos ayuda. Necesitamos auxilio. Salmo 121 dice Alzaré mis ojos a los montes, ¿de dónde vendrá mi socorro?
  3. Dios no desprecia un corazón dispuesto. ​Lo contrario de un corazón dispuesto, es un corazón endurecido. Jesús les habla fuerte a sus discípulos, y nos habla fuerte a nosotros y llama con energía nuestra atención para que dispongamos el corazón en depongamos toda barrera de orgullo y demos paso al conocimiento de Dios, para ser usados en la extensión de su Reino. Un corazón dispuesto, obedece y se enfoca en Dios y su Reino.

C. Jesús nos recuerda que él es Todopoderoso. Ustedes han visto, ustedes han oído, ¿No recuerdan? NO DEBEMOS OLVIDAR LA MISERICORDIA, NI LA GRACIA DE DIOS SOBRE NUESTRAS VIDAS. Pero qué fácil para nosotros es olvidar que Dios es tan bueno. Hagamos un ejercicio mental, y por un momento recuerde de dónde le ha traído el Señor, no quiero decir, de dónde lo ha sacado, pero si piense: ¿De dónde me ha sacado el Señor? ¿Hasta donde me ha traído? Decida NUNCA volver atrás.

  1. Él nos ha llenado de favores y misericordias.
  2. Cada día experimentamos un milagro y ni cuenta nos damos.
  3. ¿Acaso no entienden?. Qué debemos entender, pues debemos entender esta idea que no debe irse jamás de su mente: D​ ios es todo en mi vida, nada es más importante que Dios, y no me dejaré llevar por la corriente de este mundo.

​Somos producto de la gracia de Dios. NO LO OLVIDE, usted es depositario de la multiforme gracia de Dios. Si usted se acerca más a Dios, más se va a parecer a Cristo, si usted se ejercita en este pensamiento: ​Dios es todo en mi vida, nada es más importante que Dios, y no me dejaré llevar por la corriente de este mundo… ​le aseguro que está por ver los mejores años de su vida. No hablo de un camino sin espinas, pero si le hablo de vivir una vida en sintonía con la gracia de Dios.

Repita conmigo: D​ios es todo en mi vida, nada es más importante que Dios, y no me dejaré llevar por la corriente de este mundo.

FUENTE: Gracias Pastor DORIAN BANEGAS por sus enseñanzas.

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